Como limpiar el equipo de audio

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En este artículo se analizan los materiales y limpiadores adecuados para limpiar de forma segura los altavoces de su equipo de audio, incluidos los recintos, las rejillas, los conos de los altavoces y los terminales.

Los mejores materiales para limpiar tu equipos de audio

Antes de empezar a limpiar, averigüe de qué material están hechas las cajas, independientemente del tipo o tamaño del altavoz. Los recintos de los altavoces están hechos de diferentes variedades de pino, arce, roble, abedul, cerezo, nogal y otros. La caja puede ser de madera pintada o teñida, lo que le permite mostrar su aspecto natural. O bien, puede estar tratada con barniz, laca, poliuretano o cera, que tienden a mostrar un brillo o satinado.

Limpie los gabinetes exteriores de los altavoces

Utilice paños limpios, sin pelusas y suaves en los altavoces, como una toalla de algodón o microfibra. Una camiseta vieja de algodón también funciona bien (córtela en trozos utilizables). Evite las toallas de papel, ya que éstas dejan pequeñas fibras o partículas no deseadas en las superficies.

Además, utilice dos paños de limpieza para limpiar los altavoces (uno para mojado y otro para seco). Cuando limpie el polvo, el paño seco debería ser suficiente. Pero para cualquier cosa más sucia, utilice ambos.

Esta es una forma eficiente y eficaz de limpiar las cajas acústicas:

  • Humedezca el paño para que esté ligeramente mojado con el líquido limpiador que prefiera y aplíquelo en una zona poco visible (como la parte trasera de la caja acústica, hacia la parte inferior) para probarlo. Si no hay ninguna reacción adversa en la superficie del altavoz después de unos minutos, entonces es seguro continuar.
  • Empiece por un lado del altavoz y limpie suavemente la superficie con el paño húmedo. Limpie en la dirección de la veta, tanto si el exterior de la caja es de madera auténtica como de chapa de madera. De este modo, se conservará el aspecto con el paso del tiempo. Si el altavoz no tiene vetas (por ejemplo, la superficie es laminada o está recubierta de vinilo), utilice trazos largos y suaves.
  • Cuando termine con una de las caras, limpie cualquier residuo que quede. Si utiliza su propia mezcla de jabón, vuelva a limpiar la superficie con agua corriente. A continuación, seque completamente la cara con el paño seco.
  • Continúe trabajando en cada lado de la caja acústica, incluyendo la parte superior e inferior. Tenga en cuenta las costuras o grietas, ya que estos lugares pueden acumular líquido y residuos.
  • Cuando termines de limpiar, aplica una capa protectora de aceite o barniz. Si es así, utiliza un paño limpio aparte y sigue las instrucciones del producto.

Limpiar las rejillas de los altavoces

Las rejillas de los altavoces cubren los transductores (las piezas con forma de cono que se mueven para producir el sonido) y los protegen de los objetos y de la acumulación de polvo. El material de las rejillas suele ser un tejido delicado, similar al de las medias y los pantys.

Algunos altavoces tienen rejillas metálicas que pueden estar perforadas en forma de gofre, tablero de ajedrez o diseño de puntos. Las rejillas de tela pueden fijarse a los marcos, que suelen desprenderse con un suave tirón.

A continuación se explica cómo limpiar las rejillas de los altavoces:

  • Empieza por las esquinas superiores y afloja las púas con la punta de los dedos. Una vez que la parte superior se haya soltado, sigue hacia abajo y haz lo mismo con las esquinas inferiores. Si el marco está fijado con tornillos, quita los tornillos y luego haz palanca para quitar el marco del altavoz.
  • Coloque la rejilla o el marco sobre una superficie plana y utilice una manguera de aspiradora con un accesorio de cepillo para eliminar el polvo. Así se asegurará de que la aspiradora (especialmente una aspiradora potente) no tire y estire la tela.
  • Si el material tiene suciedad resistente o mugre, humedezca un paño de algodón o microfibra con una mezcla de agua tibia y detergente suave. A continuación, restriega la suciedad con movimientos circulares y trabaja con suavidad. Aclara la zona con un paño y agua corriente y deja que se seque.
  • Si el altavoz tiene una rejilla metálica o de plástico extraíble, límpiala (por delante y por detrás) con una esponja jabonosa en el fregadero o la bañera. A continuación, aclárala con agua y sécala completamente con una toalla de algodón suave.
  • Una vez que la rejilla se haya limpiado y secado completamente, colócala de nuevo en el altavoz. No olvides volver a colocar los tornillos.

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